Esta refrescante ensalada combina sabores tropicales y texturas crujientes para crear una explosión de sabor en cada bocado.
Las nueces aportan un toque crujiente y nutritivo, el aguacate agrega su cremosidad característica, el mango ofrece un toque dulce y jugoso, y las hojas de rúcula proporcionan un sabor ligeramente picante. Es una opción perfecta como acompañamiento para cualquier comida o como plato principal ligero y saludable.
Puedes agregarle o quitarle ingredientes a tu gusto y crear una versión personalizada.
Receta de ensalada de nueces, aguacate y mango
Ingredientes
- 2 tazas de hojas de rúcula
- 1 mango maduro pelado y cortado en cubos
- 1 aguacate maduro pelado y cortado en rodajas
- 1/2 taza de nueces picadas
- 2 cucharadas de jugo de limón
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración paso a paso
- Lava y seca las hojas de rúcula. Colócalas en un tazón grande para ensalada.
- Agrega los cubos de mango y las rodajas de aguacate al tazón.
- En una sartén pequeña a fuego medio, tuesta las nueces picadas durante aproximadamente 5 minutos o hasta que estén ligeramente doradas. Remueve con frecuencia para evitar que se quemen.
- Añade las nueces tostadas al tazón de ensalada.
- En un recipiente aparte, mezcla el jugo de limón, el aceite de oliva, la sal y la pimienta. Bate bien hasta que se combinen todos los ingredientes.
- Vierte la vinagreta sobre la ensalada y mezcla suavemente para cubrir todos los ingredientes con el aderezo.
- Sirve la ensalada de inmediato y disfruta de esta combinación.
Algunos tips para esta ensalada
Asegúrate de elegir un mango maduro pero firme para obtener la mejor textura y sabor.
Puedes sustituir las nueces por otros frutos secos, como almendras o nueces de macadamia, según tu preferencia.
Si deseas agregar un toque extra de frescura, puedes añadir unas hojas de menta o cilantro picado a la ensalada.
Si no tienes rúcula, puedes utilizar espinacas frescas como alternativa.
Para evitar que el aguacate se oxide, rocía un poco de jugo de limón sobre las rodajas antes de agregarlas a la ensalada.
Si prefieres un aderezo más cremoso, puedes mezclar el jugo de limón y el aceite de oliva con una cucharada de yogur griego.
Si deseas una ensalada más sustanciosa, con proteínas para que sea más alimenticia, puedes añadir trozos de pollo a la parrilla o camarones.
Esta ensalada también combina bien con otros ingredientes como queso feta desmenuzado o semillas de granada.
Para almacenar las sobras, guarda la ensalada sin el aderezo en un recipiente hermético en el refrigerador. Agrega el aderezo justo antes de servir para mantener la frescura y la textura de los ingredientes.
Esta ensalada es perfecta para acompañar platos de pollo a la parrilla, pescado a la plancha o incluso hamburguesas vegetarianas.
Puedes servir la ensalada sobre una cama de quinoa cocida para agregarle más sustancia y convertirla en un plato principal.
Para una presentación más elegante, puedes agregar unas rodajas finas de cebolla roja o rallar un poco de zanahoria sobre la ensalada.
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