La salsa de mostaza y miel es una de las más fáciles, rápidas y deliciosas que puedas preparar. Esta salsa puede cambiar totalmente el sabor de un plato, sin que tengas que ir a buscar ingredientes fuera de la cocina cotidiana. Y lo mejor, es que estará lista en muy pocos minutos.
Entonces, si estás listo para descubrir esta nueva arma que renovará toda tu cocina habitual, no tienes más que dejar a la mano la mejor mostaza de tu despensa, un pote de miel de abejas y una botella de vinagre blanco. Opcionalmente, puedes hacerte también con aceite de oliva, jugo de limón, hierbas aromáticas, y con las especias más comunes, que no son otras que la sal y la pimienta.
Receta de salsa de mostaza y miel casera
Ingredientes
- 4 cucharadas soperas de mostaza de Dijon
- 50 mililitros de vinagre de vino blanco
- 2 1/2 cucharadas soperas de miel de abeja
Elaboración paso a paso
- Consigue una olla pequeña y colócala en la cocina, a fuego mínimo. Para esta receta, el calor será únicamente un ligero catalizador para ayudar a mezclar los ingredientes más rápido y mejor.
- Agrega el vinagre a la olla y espera un minuto para que tome temperatura.
- Luego, incorpora la mostaza y revuelve con una cuchara o espátula de madera, hasta mezclar totalmente.
- Enseguida, incorpora igualmente la miel y revuelve hasta obtener una salsa homogénea.
- Entonces prueba (con cuidado, para no quemarte) la salsa para adaptarla a tu gusto. Si quieres una salsa más dulce, agrega un poco más de miel. Si la quieres más ácida, agrega mas vinagre, o un poco más de mostaza. Opcionalmente, también puedes agregar una pizca de sal y/o pimienta molida. En cualquier caso, vuelve a mezclar todo.
- Eso es todo. Tu salsa de miel y mostaza ya está lista.
Consejos para esta receta
- En lugar de usar mostaza de Dijon, puedes probar con otros tipos, como la mostaza a la antigua, que contiene granos, o la mostaza verde.
- En el caso de la miel, también puedes probar con ciertos tipos particulares, como la miel de acacia o la miel de romero.
- Para obtener una consistencia menos espesa, puedes agregar más vinagre. Sin embargo, toma en cuenta que esto también la volverá más ácida.
- También puedes usar jugo de limón en lugar de vinagre para una versión más fresca y natural.
- Hay cocineros que mezclan también un poco de aceite de oliva al resto de la salsa. Esto te permitirá obtener un sabor menos concentrado, con una consistencia bastante práctica para aderezar ensaladas o carnes a la barbacoa.
- Al momento de servir, espolvorea con queso parmesano rallado, para crear una combinación ganadora.
Qué hacer con la salsa de miel y mostaza
Puedes acompañar una muy larga lista de platos con este aderezo. De hecho, puedes ponerte creativo e inventar tus propias combinaciones, pero para comenzar por alguna parte, aquí te daremos varias ideas :
- Como aderezo para múltiples ensaladas, desde la más simple ensalada verde, preparada únicamente con lechuga.
- Para acompañar carnes a la barbacoa.
- Como salsa para pollo preparado de las maneras más básicas: a la plancha, horneado, a la parrilla.
- Por supuesto, también puedes utilizarla para sazonar tus alitas de pollo.
- Esta salsa también se combina muy bien con la carne de puerco.
- Como marinada para cualquier tipo de carne.
- Para aderezar salchichas, hamburguesas y hot dogs.
- En el aperitivo, como acompañamiento de crudités.
- Para servirla con una buena tabla de quesos, al estilo de un chutney.
- Para renovar tus recetas de sandwich favoritas.
- Como salsa para pescados, incluyendo pescados blancos o una buena pieza de salmón o atún.
- De acompañamiento para servir junto a carne de pato.
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Miryam dice
gracias por esta receta, preparé la salsa me pareció buenísima pero le agregué aceite de ajonjolí y limón y quedó muy deliciosa