Las cigalas es un tipo de molusco de un extraordinario sabor, así como las navajas o las vieiras, por su alto costo en el mercado se convierte en un lujo el poder degustar algo preparado con ellas.
Hoy, en Comedera, prepararemos cigalas a la plancha. Una preparación que no amerita mucho esfuerzo pero que te garantizo, te dejará muy buen sabor de boca.
Este plato es de SATISFACCIÓN GARANTIZADA, sí, así como lees, en mayúscula sostenida.
Este marisco debe consumirse rápido después de ser recolectado, dura muy poco tiempo fuera de su hábitat, por lo que es raro encontrarlas vivas en la pescadería, es mejor comprarlas a buen precio y congelarla hasta el día que se vaya a cocinar. Es posible encontrarlas a la venta durante todo el año.
Vamos a empezar con esta rápida preparación de cigalas a la plancha.
Cómo hacer cigalas a la plancha
Ingredientes
- 12 cigalas
- 2 dientes de ajo
- 2 cda. perejil fresco finamente picado
- 5 cda. aceite de oliva virgen extra
- sal gruesa al gusto
- 1 limón
- 1 cda. vino blanco
Elaboración paso a paso
- Abre las cigalas en dos, con ayuda de un cuchillo filoso.
- En un tazón vamos añadiendo el ajo y el perejil bien picado, 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, más una de vino blanco. Mezclamos bien.
- Ponemos la plancha al máximo de potencia, y rociamos con aceite de oliva virgen extra.
- Colocamos las cigalas por el lado de la concha (contrario a las patas) durante 10 minutos, que es el lado menos resistente al calor.
- Repartimos uniformemente el aderezo sobre la zona interna, que está a la vista.
- Les damos la vuelta en la plancha y cocinamos ahora 2 minutos, con las patas y el aderezo en la zona de calor.
- Retiramos de la plancha y salamos al gusto.
- Sirve estando aun calientes.
Tips para el éxito de las cigalas a la plancha
- La cigala tiene muy pocas calorías y una fuente valiosa de proteínas. Saludable en todos los aspectos y exquisita en cuanto a su sabor.
- Si quieres hacer las cigalas enteras sólo debes cuidar el tiempo de exposición al calor para no “machacar” el marisco. Si nos pasamos de tiempo luego no nos sabrán a nada.
- Si decides hacerla sin cortarla a la mitad tendrás más jugosas en su interior.
- Preparamos el aderezo. En un tazón y luego pasarlo a un envase con tapa y batimos para que los sabores se mezclen a la perfección,
- De esta manera emulsiona la mezcla y queda en una textura melosa, perfecta para añadir al marisco.
- Si decides cortarla en dos mitades. Colocamos la cigala con la barriga hacia abajo. Clavamos un cuchillo afilado donde la cabeza se junta con la cola. Cortamos primero en dirección a la cola y después hacia la cabeza. Y ya tenemos la cigala lista para cocinar.
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