Las salsas picantes son un básico de los hogares mexicanos, por eso cuando me entero de opciones de otros países de Latinoamérica, no pierdo la oportunidad de probarlas en casa y esta salsa de rocoto es perfecta para hacer en la comunidad de nuestra cocina.
La salsa de rocoto es originaria de Perú y como su nombre lo indica usa como ingrediente principal el rocoto, un chile propio de la región Andina. Los encuentras en una variedad de colores y su sabor es muy picante con un aroma bastante llamativo.
Esta salsa es perfecta para acompañar guisos con carne, pero si eres como yo que le pone salsa a todo, entonces dale vuelo a tu imaginación y pruébala con pollo, pescado y cerdo.
Es importante que antes de pasar a la receta, aclaremos que es muy fácil de preparar y lleva pocos ingredientes, pero toma un poco de tiempo porque hay que asegurarnos de bajar el picor de los chiles para que sea comestible y no nos haga sufrir por días.
Así que vamos al paso a paso y no olviden revisar nuestros tips extra más abajo.
Cómo hacer salsa de rocoto en casa
Ingredientes
- 5 rocoto
- 1 diente de ajo
- 2 cda aceite de oliva
- sal y pimienta al gusto
Elaboración paso a paso
- Parte los rocotos por la mitad y viértelos en una olla con agua. Cocina hasta que hierva.
- Tira el agua caliente, llena con agua fría y deja hervir de nuevo. Repite el proceso 1 vez más.
- Con ayuda de unas pinzas, pasa los rocotos por encima de la flama de la estufa para quemarlos ligeramente y obtener un ahumado rápido.
- Retira la piel quemada de los chiles, quita las semillas y reserva.
- En un procesador de alimentos o licuadora, vierte los rocotos limpios y ahumados, ajo, aceite, sal y pimienta al gusto.
- Muele hasta que tengas una salsa espesa pero uniforme.
- Vierte en un bowl, sirve y disfruta.
Salsa de rocoto: tips extra
- Si quieres que salsa quede mucho más picante, entonces puedes hacer las primeras cocciones y cambios de agua con los rocoto enteros.
- En la receta cambiamos el agua y dejamos hervir los rocoto 3 veces, pero entre más veces cambies el agua menor será el picor; para una salsa muy ligerita y que pique poco puedes cambiar el agua hasta 8 veces.
- Te recomendamos usar guantes para cortar y limpiar los rocoto, así evitas irritar la piel. Y recuerda no tocarte la cara y mucho menos los ojos durante la prelación de la salsa.
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