La crema de limón o lemon curd, es un postre de origen inglés, suave, elegante y útil para realizar diversas preparaciones.
Esta crema se puede comer sola a cucharadas o utilizarse para acompañar un yogurt, un bizcocho de limón, hacer una receta de crumble o preparar el famoso pie de limón. También puede utilizarse para acompañar galletas, muffins, barras dulces o preparar pequeñas tartas de limón. Otra idea deliciosa es simplemente acompañarla de merengue.
Receta de crema de limón casera
La receta de la crema de limón lleva pocos ingredientes y es muy fácil de hacer. Es suficiente con prestar bastante atención al momento de seguir los pasos de la preparación, para obtener la buena consistencia y que los ingredientes se mezclen y cocinen correctamente.
Además se trata de un postre sano, ligero y refrescante, como para sentirse inglés y servirse una buena porción con pastelitos y un servicio de té tradicional.
Crema de limón o lemon curd
Ingredientes
- 3 limones
- 1/8 kilo de azúcar glass
- 1/8 kilo de mantequilla sin sal
- Una pizca de sal
- 1 huevo completo
- 4 yemas de huevo
Elaboración paso a paso
- ¿Cómo hacer crema de limón?
- Vamos a comenzar por encargarnos de los limones. Escogeremos el más bonito, lo lavaremos bien y luego, rallaremos su cáscara lo más finamente posible. Resérvala, momentáneamente.
- Cortaremos por la mitad el mismo limón, para exprimirlo. Haremos lo mismo con los otros dos. Asegúrate de que las semillas o la pulpa no se mezclen con el jugo. De momento, reservaremos este líquido.
- Ahora nos ocuparemos de la mantequilla. Para usarla en esta receta, tenemos que prestar atención a que siempre esté fría. De entrada, esto permitirá que mantenga la consistencia necesaria para que podamos cortarla en cuadritos pequeños, que reservaremos posteriormente.
- Luego, vamos a buscar una olla de buen tamaño, con la cual realizaremos el baño de María necesario para preparar la crema de limón. Agregamos suficiente agua y la pondremos a calentar. No la llenes de líquido haya arriba para que no se desborde cuando coloquemos adentro el otro recipiente con la crema.
- El segundo recipiente que utilizaremos, tiene que ser apto para un baño de María y por supuesto, más pequeño que la olla. Allí vamos a agregar el contenido de un huevo completo y las yemas de otros cuatros huevos. Cuando separes las yemas de las claras, conserva estas últimas para preparar otras recetas.
- En el mismo recipiente, vamos a agregar el azúcar y enseguida vamos a batir lo suficiente hasta que la mezcla se convierta en una crema.
- Una vez que hayamos obtenido la crema, vamos a agregar el jugo del limón que hemos reservado previamente. Todavía no tocaremos la ralladura.También vamos a agregar a la mezcla una pizca de sal.
- Enseguida, revolveremos bien todo hasta la obtención de una crema homogénea.
- Lo siguiente será colocar el recipiente con esta crema en el centro del baño de María. El agua de la olla para este tipo de cocción ya debería estar caliente.
- De inmediato, comenzaremos a revolver la crema que está en baño de María (de manera manual, con la ayuda de una espátula o cuchara de cocina). Con la influencia del calor, la mezcla va a comenzar a volverse más espesa, poco a poco. Mantendremos siempre el calor entre medio y bajo, para controlar que el agua no vaya a romper en ebullición.
- Revolveremos la crema durante unos 8 minutos. Este tiempo debe ser suficiente para que tome una buena consistencia espesa. Entonces la retiraremos del fuego, con cuidado de no quemarnos.
- Una vez que hayamos sacado la crema de limón del calor, vamos a añadir la mantequilla y también la piel rallada del limón. Batiremos hasta que la mezcla se vuelva homogénea y después, dejaremos reposar la preparación hasta que se enfríe.
- Cúbrela con un film plástico o con una tapa, para que no se deshidrate.
Eso es todo: la crema de limón ya está lista.
Consejos para la preparación de la crema de limón tradicional
- Para preparar esta receta, trata de conseguir limones no tratados químicamente. Cuando los frutos son tratados con pesticidas o productos similares, la piel o cáscara absorbe los residuos. Entonces, si utilizas esa piel para preparar una receta, vas a consumir un poco de estos químicos.
- Cuando ralles el limón, procura solamente tocar la parte verde o amarilla de la piel y no la parte blanca. Esta última aportará un toque amargo que no queremos en nuestra crema.
- Si los limones que vas utilizar a son muy pequeños, puedes rallar la cáscara de dos, en lugar de uno solo.
- Hay quienes prefieren comprar jugo de limón ya exprimido, en el supermercado, para ahorrarse tiempo. Sin embargo, el resultado nunca será el mismo que con un zumo de limón fresco, recién exprimido. Además, de todas maneras vamos a necesitar por lo menos la ralladura de un limón para poder preparar esta receta.
- Puedes preparar una versión de esta receta, utilizando naranjas en lugar de limones. También hay quienes la hacen con otros cítricos, como mandarinas o clementinas.
- Les dejo por aquí un enlace, por si acaso necesitan ayuda para aprender a separar las claras y las yemas del huevo.